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Obtienen mexicanos mejores remuneraciones económicas por la donación, que en una jornada normal de un operador en una industria maquiladora
Ante el desempleo y la falta de oportunidades laborales bien remuneradas, cientos de habitantes de la zona fronteriza de México ven en la ‘donación de plasma’ una fuente más de ingresos o una buena opción de empleo.
En ciudad Juárez, Chihuahua, la afluencia de donantes se disparó en los últimos meses a razón de por lo menos 400 por día, equivalente a un promedio de entre 36 y 38 personas por hora.
Los donantes, están obligados a acudir dos veces por semana; el primer día reciben un monto de 20 dólares estadounidenses y el segundo 45 dólares, más un bono que va de 5 a 10 dólares cuando obtienen la categoría de ‘donantes regulares’, o cuando recomienda a otra persona.
Cada donante debe vender entre 690 y 900 mililitros de plasma sanguíneo cada vez que acude, según su peso.
Lorena Ramírez de 30 años y obrera de una maquiladora del tercer turno, es una de los cientos de juarenses que cruzan a la ciudad de El Paso, Texas (al sur de Estados Unidos) para donar su plasma a cambio de recibir alrededor de 70 dólares a la semana. Con 196 libras de peso, Lorena vende por sesión, 900 mililitros.
Con su trabajo de ocho horas diarias como obrera, en la industria maquiladora, Ramírez gana alrededor de 550 pesos semanales incluyendo bonos, el equivalente a unos 44 dólares, (tomando como base promedio el tipo de cambio actual de 12.50 pesos).
Pero como donante de plasma ella gana 70 dólares a la semana (875 pesos). Ramírez, acude dos veces por semana desde hace mas de 18 meses al laboratorio Talecris Plasma Resources, ubicado en la calle Texas y Virginia a una milla del puente internacional Paso del Norte, para vender un litro de su plasma a cambio de dicha suma.
Con ese dinero, Ramírez ajusta para pagar la renta de su casa y, los servicios de la misma como agua, luz y gas, y hasta se puede darse el lujo una que otra semana de salir a pasear.
A invitación de su prima Juana, Consuelo Rodríguez asiste por primera vez como donante, nerviosa por desconocer el proceso de donación, pero dijo estar muy entusiasmada de estar en los laboratorios por que, por ser su primera vez, recibirá 100 dólares, ya que aprovecha la promoción de recibir 30 dólares la primera donación y 70 dólares la segunda.
Consuelo de 22 años, es estudiante universitaria, y espera ajustar los cobros de colegiatura que tendrá que derogar el próximo ciclo escolar, pues entre libros, cuotas y demás gastos que genera el estudiar, sus padres se ven ‘apretados’, para completar los gastos.
“Ellos creen que tengo un empleo de medio tiempo en una tienda departamental en El Paso”, señaló Rodríguez un poco ruborizada, al sentir humillación por realizar la donación entre la clandestinidad de sus padres y amigos.
“Aunque es algo legal, sientes como si estuvieras haciendo algo malo, no se porque, si es algo normal además de que ayudas a la medicina y a otra gente que lo necesita”.
Consuelo dijo sentirse en un principio extraña pero al cabo de un par de horas –mientras realiza su alta como donante-, lo supero.
“La gente que acude a los laboratorios, se comporta como si llegaran a su área de trabajo; muchos ya se conocen, otros auxilian y dan ánimos a los primerizos, mientras que otros tantos te aconsejan como prepararte para ser un buen donante.
Chistes, enojos, desesperación y alegría se aglutina en la recepción, mientras esperan por lo menos dos horas a ser llamados para la donación de plasma.
“La primera cita tardas unas ocho horas; porque hay que darse de alta, realizar laboratorios y pruebas de sangre, así como llenar la papelería correspondiente y la revisión médica que realiza una enfermera”, dijo Rodríguez pero señaló que su prima invierte unas tres o cuatro horas cuando acude a la donación.
Juana Rodríguez, ve la donación como cualquier otro trabajo en el que hay que prepararse para dar un buen plasma, porque “Si la sangre esta muy grasosa, te impiden donar y pierdes la oportunidad de tener dinero, o de que te ‘suspendan’ por un tiempo”.
“El secreto para no sentirte mal, y dar un buen plasma, es hidratarte y alimentarte bien, debes tomar muchos líquidos y desayunar, pero sin grasa, porque si no comes bien, te sientes mal durante la donación y hasta puedes desmayarte”. Dijo Juana, quien lleva más de tres años acudiendo a los laboratorios.
“La segunda vez que done, me fue muy mal como a los 15 minutos del proceso, comencé a sentir náuseas, mareos y mucho calor, pensé que iba a morir ahí, pero la supervisora de las enfermeras me auxilio hasta concluir mi donación”.
Juana, señaló, que una vez repuesta de los estragos que deja la donación, sintió miedo de que la suspendiera, pero no fue así; “dejé pasar cinco días para hidratarme y regresé”.
Talecris, colecta a nivel global alrededor de cinco millones de litros de plasma al año que luego se utilizan en la producción de terapias para pacientes con males sanguíneos como la hemofilia. Baxter reportó en su página web en el 2008 una ganancia neta de $431 millones en el segundo cuarto del 2007, 39 por ciento más que en el mismo periodo del año anterior.
Baxter, proporciona una amplia gama de proteínas terapéuticas derivadas de plasma a través de innovadores y tecnología recombinante.
Las terapias se utilizan para mejorar la vida de los pacientes que requieran apoyo para la hemostasia, deficiencias inmunitarias, Alpha 1-PI deficiencia, y la hemofilia y la sangre de otros trastornos relacionados.
Talecris, Junto con Biolife y Biomat USA, de la española Grifols, International Bioresources, se han establecido en las principales ciudades fronterizas de Texas y captan el plasma en un 90 por ciento de mexicanos de bajos ingresos que cuentan con visa láser para ingresar de manera legal a Estados Unidos.
Atraídos por las remuneraciones económicas que superan sus salarios, cientos de residentes fronterizos como Lorena, Juana o Consuelo, usan su visa de turista para acudir a laboratorios de recolección de plasma sanguíneo localizados en ciudades como El Paso, McAllen, Brownsville, Laredo y Eagle Pass.
LEGAL O NO
Las autoridades aún no determinan si la donación con pago de plasma sanguíneo constituye un trabajo remunerado, lo que podría desembocar en una violación a las leyes migratorias y originar la cancelación de la visa y por tanto el permiso para entrar a Estados Unidos para quien ingrese como turista y ejerza en dicho país tal actividad.
Los agentes de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) podrían negarles la entrada, pero no lo hacen porque el Departamento de Seguridad Interna no logra definir aún si la donación remunerada de plasma es un trabajo o no, y simplemente porque los donantes mienten a la hora de cruzar dijo Roger Maier, vocero de la dependencia federal, en El Paso, Texas.
“Nunca te dicen que van a donar plasma”, señaló
Según diversos reglamentos del Servicio de Rentas Internas (IRS), esa remuneración corresponde al ingreso por servicios personales de un extranjero no residente de Estados Unidos.
Este ingreso está sujeto a retención de 30 por ciento de impuestos si se rebasa la cifra de 3 mil 400 por el año. Los donantes cuyo ingreso rebase esa cantidad deben obtener un número de identificación de pago de impuestos (ITIN) y presentar su declaración anual, según ordena el IRS. En tanto, las empresas deberán retener el 30 por ciento de las remuneraciones.
Por lo anterior, las empresas encargadas de recolectar el plasma, han establecido que el dinero que reciben los donantes es sólo una compensación y no un trabajo.
Es por lo anterior que las personas que recurren a la venta de plasma lo ven como algo clandestino y prohibido, señaló el psicólogo Lorenzo Silva.
“Las leyes estadounidenses lo ven como tal, aunque las empresas fijas obtienen fuertes remuneraciones”, dijo.
La operatividad de dichos laboratorios, se sustenta en que la mayoría de los donantes son mexicanos de bajos ingresos, por tanto los derechos hacia dicho sector no esta bien establecido, señaló el especialista.
“Tengo entendido que la cantidad que reciben los donantes de 70 dólares a la semana es nada, si comparamos el costo que tiene el plasma en el mercado; que alcanza hasta los mil dólares por 900 mililitros del líquido o ‘suero’ de la sangre”.
Silva considera que es mínimo el impacto psicológico en los donantes, tiene más carga el social, ya que por la mayoría son vistos como personas que les gusta la vida fácil o que no se esfuerzan por trabajar o sacar adelante su persona o familia; y hasta cierto punto son comparados con actividades como la drogadicción o prostitución, por usufructuar con su cuerpo.
El rechazo y desprecio, hace que los donantes se mantengan en la clandestinidad.
Como el caso de Agustín López, padre de tres hijos quien desde diciembre se quedó sin empleo y pese a que diariamente busca un trabajo, aun no logra encontrarlo.
Desesperado porque tiene que pagar la casa que en Octubre del 2007 Infonavit le había otorgado, los servicios que la misma genera, la manutención de sus hijos y la escuela, lo obligaron a ser donante de plasma.
‘Ni mi esposa, hijos, y amigos saben a lo que vengo a El Paso dos veces por semana”, dijo López. “Me da vergüenza que se enteren hasta donde he tenido que llegar, ¡he tocado y tocado puertas para tener un trabajo y nada!”.
“Con este dinero les llevo comida a mis hijos y mantengo la casa; pues yo era el único que trabajaba, cuando me quede sin trabajo”
¡La verdad! dijo, “’no es nada fácil venir a donar, al menos para mi, los 50 minutos que dura el proceso de donación, la paso mal, me dan mareos, se me revuelve el estomago y me da mucho calor, sin contar que le tengo miedo a la aguja, porque cada donación, me ‘pican’ hasta cuatro veces, dizque porque no hallan la vena”.
Pero López dice que su calvario comienza desde que tiene que tomar el camión, pues vive a las orillas de la ciudad; “el camión dura unas dos horas en llegar al centro y desde el Monumento tengo que caminar hasta acá, (alrededor de 6 millas y media) luego me regreso igual pero más cansado”.
“La otra vez que salí del Talecris me fui corriendo para agarrar el camión y cuando me detuve, no podía ni respirar, las piernas me temblaban y sudaba muy frío”.
Y todo esto dijo, por no tener trabajo; “Juárez, ya no es como antes; México esta perdido”.
FALTAN EMPLEOS
De acuerdo a datos del INEGI revelados en mayo del pasado año, la Población económicamente activa de abril fue de 7.5 por ciento; por lo que cada vez son más las personas que necesitan de otro empleo.
En abril pasado aumentó en 346 mil 500 el número de personas subempleadas en el país, esto es que 3 millones 250 mil personas declararon tener necesidad y disponibilidad para trabajar más horas en ese mes.
Según el INEGI, la tasa de subocupación o “dobleteo” ascendió a 7.5% de la población ocupada. En marzo, 6.7% de los ocupados estaban en esta situación, el equivalente a 2 millones 900 mil personas.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) elaborada por el INEGI, en el cuarto mes del 2008, 96.39 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) estuvo ocupada.
De ese total, 40.6 por ciento se concentró en el sector servicios, 19.5% en el comercio y 16.8% laboró en la industria manufacturera. Sin embargo, la tasa anual de generación de empleos formales muestra una tendencia decreciente en línea con la desaceleración de la economía.
Según las nuevas cifras de la Secretaría del Trabajo, en abril se crearon 217 mil empleos formales en México, lo que implicó una tasa anual de 2.9%, contra la tasa de 4% observada en diciembre de 2008.
En abril, las plazas permanentes crecieron a una tasa anual de 2.8% y las eventuales 3.5%.
Por su parte, la tasa de desempleo en el país fue de 3.61% de la PEA en abril, es decir, que alrededor de un millón 564 mil personas buscaron activamente empleo sin encontrarlo.
Al eliminar la diferencia de días hábiles, la tasa de desocupación se situó en 3.73%, es decir, 0.03 puntos porcentuales superior a la observada en marzo. En el cuarto mes de 2008, la tasa de desempleo masculina disminuyó de 3.35% a 3.28%, respecto al 2007, mientras que la femenina se incrementó de 3.99% a 4.14%.
Al considerar sólo las 32 principales áreas urbanas del país, la desocupación significó 4.51% de la PEA durante abril.